martes, 9 de diciembre de 2014

Cuenta el derecho de ser artista y cantar a la vida




Nuestra América, a la izquierda Luis Llaguno
   Luis Llaguno Pérez, director del grupo Nuestra América, en la ciudad cubana de Cárdenas, quien acaba de obtener el Premio White, por la obra de la vida en la provincia de Matanzas, se regocija por ser artista, cantar a la vida y profesar libremente su vocación religiosa.
  Músico y compositor fue de los primeros contactados por Silvio Rodríguez, en la década del 70 del siglo XX, cuando el trovador organizaba el movimiento defensor de la canción de autor, y al frente de la agrupación, con más de cuatro décadas de fundada, marcó pautas en arreglos vocales.
  Más allá de vanagloriarse del codiciado galardón que otorga cada año la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC)  en la filial de Matanzas, Llaguno prefiere comentar sobre el reconocimiento al maestro Ildefonso Acosta, destacado guitarrista concertista, por sus 75 años de vida.
  Mientras ensaya y organiza varios conciertos de Navidad que ofrecerá el grupo Nuestra América en instalaciones turísticas de Varadero y en la Catedral de Camagüey, como presidente de la filial de música de la UNEAC en el territorio se preocupa también por la atención a los más jóvenes trovadores.
 
Tocando el piano el maestro Frank Fernández

  Orgulloso de vivir en Cuba, Llaguno al frente de su colectivo vocal atesora numerosos premios en Festivales nacionales, reconocimientos en escenarios foráneos y  porta el compromiso con su tiempo, a la vez que defiende los valores humanos de la ética, paz y amor que coinciden con su fe.
  Junto a su esposa Loly Márquez, el guitarrista y compositor Rubén Rodríguez y Tirso Díaz, únicos fundadores de la agrupación, en la discografía de Nuestra América se rinde siempre homenaje a compositores que confiaron en su pericia y talento, en arreglos musicales e interpretaciones novedosas.
  Luis Llaguno desde el Jardín de Isabel, peña habitual del grupo en el museo Oscar María de Rojas de la llamada Ciudad Bandera, hasta en el Muro de Berlín, sitio a donde cantaron por la paz en la década del 90, como buen cubano conoce que cuentan sus derechos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario